sábado, 12 de marzo de 2011

El último gran héroe

Releyendo un reportaje sobre Iribar que hicieron los amigos de Soloporteros, y que leí gracias a un gran amigo, Pedro Mayo, me puse a reflexionar sobre el estado de la portería en la actualidad. Siento que seré más subjetivo de lo habitual en esta entrada, pero los porteros estamos en crisis.

Hubo una época que cuando los equipos se iban al mercado internacional para buscar un portero, les preocupaba básicamente dos cosas. Que supiera blocar los balones y que tuviera dotes de mando en su área, a grandes rasgos. Se entrenaba a los guardametas para que fueran auténticos especialistas en no dar segundas oportunidades a sus rivales a la hora de encajar los disparos, y si las dejaban que fuera lo más lejos posible. Además, se les pedía un dominio del área y sobretodo unos grandes dotes de mando para ordenar la defensa.

Poco a poco la figura empezó a cambiar, con defensas que jugaban más alejadas de la portería y obligaban al arquero a cubrir la espalda de sus defensores. Pero siempre, sin perder de vista la función principal del portero, que era coger los balones. Pero, llegaron los 90 y con ello se privó al portero de recibir con las manos los pases de sus compañeros. Se empezó a implicar el portero en el juego colectivo; dejaba de ser la persona aislada que detenía balones para convertirse en el primer atacante de los equipos.

Aún así, hijos de las reglas antiguas vislumbramos los mejores porteros que he visto yo hasta la fecha. Los Arkonada, Buyo, Zubizarreta, Koepke, Vitor Baia... y en especial Peter Boleslaw Schmeichel. El gran danés se movía como un portero pequeño, técnicamente espectacular, dominando el área como su fuera su casa y con un saque de pie y de manos que parecía los disparos de cañones de largo alcance. Además fue de los primeros en subir a rematar y marcar goles!

El gran danés tuvo sus herederos, entre los que yo destacaría a Oliver Khan, creo recordar que el único portero que fue capaz de ganar el premio a mejor jugador de un Mundial, el del 2002, donde fue el artífice de que Alemania llegara a la final, pese a encajar un gol en la misma por un fallo suyo por intentar blocar un balón muy complicado.

Pero algo estaba cambiando ya; era la época de los jugadores de campo con guantes de portero. Empezaron a aflorar esta nueva especie de atletas, con grandes reflejos, una velocidad abismal, una buena capacidad para leer el juego, pero con muy pocos fundamentos de portero. Quizá el máximo exponente de esta estirpe de porteros fue Fabien Barthez, el primero en romper estigmas, jugar con manga corta... el francés rompía tópicos. Desde esa aparición, los mejores porteros de cada temporada han sido eso, grandes atletas, grandes lectores del juego pero con poca capacidad para usar las manos y no dar segundas opciones. Era la época de los porteros bombero. Despejaban los balones para luego volverse a lucir con múltiples paradas.

Me van a caer tortas como panes por las afirmaciones posteriores, pero Iker Casillas y Gianluigi Buffon forman parte de esta nueva estirpe de porteros. Ambos con unos reflejos felinos, pero que hasta la fecha no han logrado hacer una de esas paradas que hacía Arkonada, paralelo al suelo cogiendo el balón. Ambos son auténticos maestros bajo los palos, y encima Buffon dominaba su área como nadie, mientras que Casillas era el portero de las paradas imposibles. Pero ambos eran porteros sin bloqueo de balón.

Por eso, la aparición hace ya unos años de un portero como Víctor Valdés, me hace pensar que el oficio de portero aún tiene vida. Valdés, entre las muchas virtudes que tiene, está la de no dejar segundas opciones, o dejar las mínimas posibles. Es por eso que para mi, el bueno de Víctor es el último gran héroe. No veo nuevos porteros, más jóvenes que él con esa capacidad, con ese savoire faire de auténtico portero. Ojalá me equivoque, y aparezco otro Víctor, en los próximos años, pero los augurios de las listas de mejores porteros del planeta y mejores porteros jóvenes no es demasiado esperanzadora.

PD: No estoy hablando de la calidad ni de quien es mejor y peor, la reflexión que hago es sobre la manera de parar los balones ;) No es quien para más o menos, sinó la manera de parar.

1 comentario:

  1. Víctor Valdés és un Zamora que hauria de repartir el seu premi enre mig equip!!! Casillas sempre està sól 'ante el peligro'. Encara recordo un 3-0 al Camp d'Esports al Barça B amb Valdés peinado Bustamante que ni les veia venir!!!

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