Fin del partido, empate a 2. Por primera vez en la era Guardiola se acumulan tres derrotas consecutivas y será la primera temporada en la que el Barça de Pep no levanta como mínimo una de las dos competiciones grandes. Hay que ser sinceros y los tres títulos que lleva más luchar para ganar la Copa del Rey es un premio menor, como antaño dijimos cuando lo hizo el Madrid. Sin embargo, todas las claves del fracaso de esta temporada no hay que buscarlos en los motivos puramente futbolísticos. Pero primero hablemos de fútbol:
Las Claves de Mayo:
- La teoría del embudo: Guardiola es el mejor entrenador del mundo, de eso no tengo ninguna duda y para justificarlo solo hay que leer el post anterior a este. Dicho esto, hoy volvió a fallar en los cambios. La decisión de quitar a un Cuenca que estaba siendo el mejor del partido por Tello fue un error. Cristian no tiene desborde en parado y ante la defensa del Chelsea no había espacios. El equipo empezó a desangrarse a partir de ese cambio. Además, le puso a pierna cambiada y Tello no tiene los recursos para jugar así. Las piernas no valen para jugar en el Barça, hace falta algo más.
- Alves y los espacios: Dani Alves pasa de ser el mejor lateral derecho del mundo a ser uno de los extremos más limitados del planeta. Hace tres días hizo internacional a Fabio Coentrao, que estaba jugando una temporada pésima. La fuerza de Dani Alves llega de la sorpresa, del llegar antes que estar. En parado, como Tello, carece de recursos en el desborde y en el centro. El embudo lo cerraron entre Alves y Tello, los mismos causantes de idéntica circunstancia ante el Real Madrid.
- Los defensas son para algo: Javier Mascherano es uno de los mejores jugadores en su puesto. Un lince a la hora de tirarse al suelo a recuperar balones, un maestro en el corte del balón. Sin embargo y en contra de lo que se vende es un central limitado en la defensa con tantos espacios. Hoy, una salida suya en el achique de espacios, sin la presión al hombre del balón, generó que Lampard tuviera todo el tiempo del mundo para asistir a Ramires, que entraba en carrera. Cuando el central sale a la presión del medio centro hay que cortar el balón o hacer falta, no flotar a la espera de la ayuda. Ramos, Puyol, Piqué y compañía dominan ese arte, Javier Mascherano no, por eso no es un central.
- Messi llega fundido. Leo es el mejor del mundo y como tal hay que mimarlo tanto como se pueda. Dicho esto hay que poner límites al campo. Si eres malo tirando penaltis (ha fallado 3 de 13) no pasa nada, hay que ceder el puesto de pateador a otro. Eso no es esconderse, al contrario, es el ejercicio más grande de humildad. Reconocer que algo no lo sabes hacer y dejarlo a un compañero que lo haga mejor. Algo así hizo Keita antes de la final de Roma, al pedir a Guardiola que no le situara de lateral zurdo porqué no daría la talla necesaria para el equipo.
Sin embargo, todo lo expuesto hasta aquí son datos conyunturales, decisiones puntuales o reacciones que pueden modificarse. Pero, para mi, las auténticas causas de la caída en este final de temporada hay que buscarlas más allá, en el pasado mes de junio\julio.
Las Claves del Verano
- Una plantilla descompensada: El Barça no tiene una plantilla como para ser campeón de Europa. Contaba con solo dos auténticos centrales de nivel (Piqué-Puyol). Fontàs nunca ha contado realmente y Abidal era un recurso que dejaba huérfano el lateral izquierdo. La solución de Mascherano ha lastrado toda la temporada las rotaciones eventuales en el centro del campo pues, junto con Busquets, es el único jugador de corte defensivo de un centro del campo excelso en tocadores. La venta de Maxwell, que tampoco era nivel Barça, no hizo sino lastrar una defensa ya muy mermada que quedó tocada de muerte ante la baja de Abidal. Dos centrales y tres laterales izquierdos con un único lateral derecho es un planteamiento, para afrontar una temporada con 6 competiciones, pésimo.
- Delanteros para que os quiero: Un equipo que juega con tres atacantes debería contar, como mínimo con seis. El Barça empezó la temporada con cuatro y medio, contando que Afellay no llegó como delantero puro. Las lesiones continuas de Pedro, Villa y Alexis obligaron a tirar antes de la cuenta de Cuenca primero y Tello después. Sin embargo fue una falta de reacción de la secretaria técnica no traer un nuevo jugador para dar aire al equipo y, teniendo en cuenta, que Messi pese a ser un superhombre necesita descansar. Tal vez un recambio de auténtico nivel hubiera permitido descansar a Leo, no precipitar las reapariciones de Alexis y Pedro con constantes recaídas que han impedido que lleguen a tener continuidad.
- El plan B: El Barça de Guardiola nace jugando con tres delanteros puros. Eto'o, Henry y Messi, con las apariciones estelares de Pedro. Ahora mismo, el equipo cuenta con Messi, Alexis y Villa, que parten como titulares pero no hay que esconder que estos jugadores no ofrecen un plan B. Henry recibía al espacio y al pie, tenia cuerpo para aguantar el balón si se requería además de ser un seguro en los penaltis cuando tiró alguno. Eto'o es de sobra conocido.
- Las pretemporadas: No hay duda de la importancia de llenar el deposito antes de una temporada muy dura. No hay que olvidar que la otra vez que el Barça optó a las 6 copas en la misma temporada cayó en enero en Copa del Rey ante el Sevilla y dobló la rodilla en semi finales ante el Inter. Levantó la liga con una puntuación récord. Esta temporada, salvando la diferencia de la importancia entre la Copa, que puede ganarse y la Liga, el conjunto ha jugado más partidos que nunca. Pero los jugadores están fundidos. Los errores en la definición son fruto de no llegar frescos a la zona de definición. De la misma forma, la falta de fuerza obliga que la presión se resienta.
La planificación de la temporada acaba siendo un hecho capital en el asalto a la historia. Esta vez, el equipo no daba para ser eterno. Hace falta más y mejores jugadores. La cantera es un orgullo para cualquier culé pero hay que tener claro que todo lo que sale de la cantera merece tener nivel del primer equipo.
Ahora toca cruzar los dedos y que Pep renueve. Tener al mejor entrenador y al mejor jugador del mundo bien merece seguir soñando.