Final del partido. No puedo negar que la rabia invade mi cuerpo. No soporto perder ni a las canicas, mucho menos que el equipo de mi vida y de mis sueños se deje escapar un título, sí un título, por errores de bulto propios, no achacables a ningún factor externo. El Madrid es justo campeón porqué, en eso al menos, nos gana siempre: Fondo de Armario.Y estamos en Agosto.
Quiero recordar una teoría que expuse aquí mismo en abril cuando dije que los títulos se ganan en mayo pero se pierden en junio Y para mi sigue siendo verdad. El Barça ha empezado a perder los títulos de la temporada 2012/2013 en el mes de junio, en la planificación deportiva.
La defensa, para los defensas: Salir a jugar en el Bernabéu con una zaga integrada por Adriano en la derecha (un carrilero más que un lateral), Jordi Alba en la izquierda (extremo reconvertido a lateral) y Mascherano (medio centro, que a nadie se le olvide, de central) es suicida. El resultado ha sido 2-0 en veinte minutos. El jefecito es, tal vez, uno de los tres mejores medio centros del mundo, sin embargo es un central normal y corriente. La anticipación a la que acostumbra en la medular, es suicida detrás puesto que no tienes el paracaídas de los centrales y hoy le ha pasado, con metros a su espalda. Jugar con dos laterales tan ofensivos y que tienden a subir a la vez provoca que los centrocampistas no den abasto a las coberturas y, cuando roban el balón, no estén en el medio para provocar la superioridad. Con Puyol más renqueante que en forma, el Barça no puede salir a jugarse la Liga, la Champions y la Copa con Piqué-Mascherano, con el único recambio de Bartra, un jugador sin experiencia más allá de segunda. Y menos con laterales tan ofensivos como Alba y Alves. El equipo ha mejorado, mucho, con la entrada de un defensa de verdad, Martín Montoya. Partidos grandes, al menos un lateral debe saber defender.
El drama del ataque: La temporada pasada y ya antes de Navidad se vislumbró que el Barça iba cojo en la zona ofensiva. Alexis sigue sin adaptarse al estilo Barça y de momento está más empeñado en peleas y lipotimias que en coger los conceptos tácticos que Pedro le muestra, de su manual, cada partido. Villa sigue sin estar a tope, Cuenca está lesionado y Afellay en la puerta de salida. Darse la vuelta y ver tan solo a Cristián Tello en el banquillo es para echarse a temblar. Un jugador rápido y revulsivo, pero sin apenas recursos para partidos grandes. Un buen jugador, al estilo Jeffren que el Barça ya vendió. El club sigue necesitando aquel plan B que adoleció la temporada pasada. Hay quien, nostálgicamente lo llama tener un Larsson. Yo lo llamo tener alguien que cambie el estilo. En la primera época de Guardiola, era Pedro el encargado de hacer eso, siendo la antítesis de Eto'o y Henry. Pasamos a Bojan, que fue quien cambió el perfil de Ibrahimovic (y de no ser por el gol legal que le anularon contra el Inter, seguro estaría en el Barça). La llegada de Villa en junio vino acompañada de la de Afellay en navidad, detectando ese perfil distinto que necesitaba el equipo. Pero ahora, falta el jugador capaz de salir al campo en el minuto 80 y cargarse el equipo a la espalda para hacer algo distinto. Ese hombre no es Cristian Tello.
¿Caso Cesc? Es alucinante que periodistas de renombre se estén preguntando porqué Cesc no juga. De falso nueve está jugando un tal Leo Messi, nada más y nada menos que el mejor jugador que los ojos de quien escribe haya visto (junto con Ronaldinho). Y en los interiores, su puesto natural, se encuentran los dos mejores elementos asociativos que el mundo del fútbol ha visto sobre un terreno de juego. ¿Lo ponemos de central? Como con la Roja, Cesc eligió cohabitar con Xavi e Iniesta y ahí tiene que esperar su turno. Ponerlo en calzador, como el curso pasado, dio malos resultados. La temporada es larga y tendrá minutos, mucho, puesto que Xavi tiene que dosificarse. Pero sinténdolo mucho, porqué es un jugador que me gusta, Cesc Fábregas no puede ser titular en este Barça.
Quedan dos días de mercado y el club dará salida a Fontàs, Jonathan Dos Santos e Ibrahim Afellay. Dudo que traigan a ningún otro jugador. En un año post Eurocopa y con Copa África de por medio (Song calculo que se irá un mes y medio) una plantilla corta es poco menos que un suicidio. Ojalá me equivoque...